Estamos ante la era del vídeo, por lo que es muy probable que tu empresa cuente con archivos, propios o ajenos, que precisen una transcripción de vídeo. Las palabras se las lleva el viento, pero lo escrito permanece, ¡descubre lo que las transcripciones de vídeo pueden hacer por tu negocio!
Qué es una transcripción de vídeo
Una gran cantidad de empresas se han subido al carro de la creación, difusión y retransmisión de vídeos, lo que acaba creando la necesidad de convertir ese archivo en texto. Aquí es donde entra en juego la transcripción de vídeo.
La transcripción de vídeo puede referirse a muchos ámbitos pero, en el caso que nos atañe, nos referimos al proceso de convertir el diálogo o el discurso de un vídeo en texto. Si tu empresa necesita pasar el contenido de un vídeo a un texto, ¡bingo!, lo que estás buscando son servicios de transcripción.
Sin embargo, al contrario de lo que mucha gente pueda pensar, transcribir no es lo mismo que simplemente escribir. En el proceso de la transcripción de vídeo, es necesario tener en cuenta varios elementos: la propia naturaleza de la transcripción, la temática, las personas que intervienen en el vídeo, su acento, la claridad del audio o la terminología; todo esto convierte la transcripción de vídeo en un método complicado y laborioso que sólo pueden realizar profesionales nativos de cada idioma.
Tipos de transcripción de vídeo
Al igual que ocurre en muchos otros campos, hay diferentes tipologías de transcripciones de vídeo, aunque si las categorizamos desde el punto de vista empresarial, podríamos descartar algunas como las musicales. Esto deja a tu disposición dos tipos de transcripción:
- Transcripción literal: en esta tipología, se escriben todos los sonidos que se escuchan en el vídeo, es decir, se incluyen todas las palabras inacabadas, acotaciones con sonidos ambientales, errores, gesticulaciones, interjecciones…
- Transcripción natural: el tipo de transcripción más común. En este caso, se elimina la información irrelevante, como pueden ser las interrupciones, ruidos o coletillas. Como resultado de esta “limpieza”, queda un texto más profesional y cuidado.
¿En qué puede ayudarte una transcripción de vídeo?
Hay numerosas razones por las que tú o tu empresa podríais requerir una transcripción de vídeo, ya sea por haber recibido un archivo que necesites convertir en texto, porque una tercera persona haya solicitado una copia o, quizás, porque quieras usar el contenido en diferentes formatos, con el objetivo de expandir tus servicios o productos. Y es que la transcripción de vídeo incluye un gran número de ventajas, entre las cuales podríamos destacar las siguientes:
- Dejar por escrito lo dicho en el vídeo para dar constancia de ello.
- Generar texto que sea legible para los motores de búsqueda, algo muy importante para el posicionamiento de tu empresa. De esta forma, te garantizarás un aumento de las visitas y una mayor visibilidad online.
- Distribuir en panfletos, escritos, periódicos, revistas, etc. el contenido de una sesión relevante, como puede ser una ponencia, un webinar o un programa de televisión.
- Disponer del contenido por escrito, siendo fácilmente accesible a través de bases de datos o bibliotecas digitales. Creando textos es mucho más rápido y sencillo buscar información.
- Mejorar la comprensión de ciertos colectivos, como podrían ser los extranjeros o las personas con discapacidad auditiva.
- Acceso a un público y/o mercado mayor.
- Fácil creación de contenido derivado del vídeo, para que puedas utilizarlo a tu antojo.
- Por último, pero no menos importante, podrás disponer de tu contenido en formato texto para, si lo deseas en un futuro, crear subtítulos, ya sea en el idioma de origen o en otro, recurriendo a la traducción profesional.
Como has podido comprobar, con la transcripción de vídeo enriquecerás tu contenido, haciendo que tus vídeos y tu web sean más accesibles y tengan más posibilidades de alcanzar nuevos públicos.
Deja la transcripción de vídeo en manos de profesionales
Está muy extendido el pensamiento de que este proceso puede delegarse en algún trabajador de la empresa, en muchas ocasiones personal administrativo, sin olvidarnos de los archiconocidos programas informáticos. Sin embargo, la teoría dista mucho de la realidad.
El coste de la transcripción de vídeo en manos de un trabajador es muy alto, tanto por el tiempo que necesitaría como el que perdería sin hacer su propio trabajo, sin dejar de lado su inexperiencia. En cuanto a los programas informáticos, como ya hemos dicho anteriormente, el proceso de transcripción precisa de mucha información para poder llevarse a cabo, por lo que no existe ningún software que pueda hacerlo.
Por todo esto y teniendo en cuenta las numerosas ventajas de la transcripción de vídeo, desde BigTranslation apostamos por la calidad de los servicios de transcripción de una agencia de traducción con profesionales nativos. Con tu empresa no te la juegues, confía tu contenido en un equipo humano formado con experiencia, ¡no te arrepentirás!