Nos encontramos en un siglo en el que la creación y la apuesta por las nuevas tecnologías es una realidad. Somos espectadores de primera mano del avance de los modelos de televisores, del auge de los famosísimos «smartphones» y un sinfín de nuevas tecnologías que avanzan sin cesar con el paso de los años.
En este sentido, el mundo de los negocios y la búsqueda de clientes no se han quedado atrás. ¿Acaso hay, hoy en día, muchas empresas que no cuenten con una página web? Las páginas web se han convertido en nuestra carta de presentación al mundo entero: esa es la razón por la que deben estar perfectamente redactadas y tener un estilo muy cuidado, lo que se puede lograr gracias al proofreading.
Cuando se trata de dar a conocer una empresa a nivel internacional, la mayoría opta por recurrir a la traducción profesional. Es así como se deja a disposición de los clientes la propia oferta de servicios y productos en una gran variedad de idiomas. Y es que, como se ha contrastado en numerosos estudios, más del 70 % de los clientes acaba comprando en una web que le ofrezca navegar en su propio idioma. El consumidor se ha de sentir cómodo y seguro en la compra, como si estuviera en su propia casa o comprando en una tienda de su país.
¿Hasta qué punto resulta beneficioso para una empresa la traducción profesional de su web?
Traducir tu página web debe tener un propósito definido que cumpla con los objetivos de la empresa. La creación, desarrollo y mantenimiento de una página web en varios idiomas es un proyecto que requiere mucho tiempo y esfuerzo. Si tienes un plan estratégico y unas metas bien definidas, es probable que consigas un gran impacto en muy poco tiempo:
- Mayor alcance: Llegarás a más clientes. La traducción profesional de tu página web es símbolo de una mejora en la productividad sin que se descuide el estilo e imagen propia de la empresa.
- Resultados rápidos: Traducir tu página web será una de las inversiones más rentables que tendrás a corto/medio plazo.
- Mayor tasa de conversión: Al tener un mayor alcance y dar a conocer la página, tu cartera de clientes aumentará sin prácticamente esfuerzo
Un mundo donde el 50% de las ventas y compras se realizan por vía digital
Tu web es tu carta de presentación; la traducción de tu página web, un escaparate al mundo. Para que tu mensaje llegue realmente a todos los visitantes de tu web, debes dejarlo en manos de profesionales y confiar en una agencia de traducción como BigTranslation, que te asesore sobre lo que más le conviene a tu negocio.
Traduciendo tu página web, solo encontrarás ventajas; la inversión siempre valdrá la pena.
Pero, ¿sabes a qué idiomas te interesa traducir tu negocio?
Existen herramientas como Google Analytics que no solo permiten medir las ventas y las conversiones, sino que también ofrecen información sobre cómo los visitantes utilizan tu web, cómo han accedido a ella y qué puedes hacer para que sigan visitándola.
Entre las posibilidades de incremento de visitas se encuentra el idioma. Utilizando ciertas herramientas, podrás saber desde qué países te visitan más y ofrecerás un mejor servicio a tus clientes en su propio idioma.
Hoy por hoy, está claro que el inglés no puede faltar como primera opción, ya que es el idioma de los negocios. Pero, recuerda, ¡a más idiomas, mayor alcance!
Es cierto que influyen muchos factores a la hora de traducir una web y que no solo basta con ello; una web requiere una constante actualización para que todo funcione según lo deseado. Aun así, sigue siendo evidente que invertir inicialmente en la traducción es una primera siembra de la que, sin duda, cosecharemos buenos frutos.
“La ley de la cosecha es cosechar más de lo que se siembra. Siembra un acto y cosecharás un hábito. Siembra un hábito y cosecharás un carácter. Siembra un carácter y cosecharás un destino.”
James Allen